JULIÁN MOREIRA, EL SALVAJE

     Dicen que quien busca encuentra, y hoy fue un buen día. Como es costumbre desde hace un año, navegando a ciegas en búsqueda de ilustraciones con los trazos de mi padre, me encontré con "Moreira, el salvaje". Esta obra es una adaptación de la clásica novela gauchesca Juan Moreira de Eduardo Gutiérrez.

     Ahí estaba, en la página de Columbreros, disponible para ser descargada. Hoy agradezco a Esteban Passamonti y a todos aquellos que mantienen vivos estos entrañables personajes, así como a guionistas y dibujantes. La labor que realizan es invaluable.

     La obra más conocida del escritor argentino Eduardo Gutiérrez (1851-1889), Juan Moreira, se publicó por primera vez el 8 de enero de 1880 en el Diario "La Patria Argentina", en forma de folletín. Transcurrido un año de sucesivas entregas, la famosa novela gauchesca quedó concluida, convirtiéndose en uno de los textos más importantes de la literatura argentina y del romanticismo hispanoamericano. Más tarde, Gutiérrez reescribió su obra en forma de micro relato para los hermanos Podestá, un grupo de artistas circenses del Río de la Plata. Esta adaptación adquirió gran popularidad y fue llevada al teatro, el cine y la historieta.

     El protagonista principal, quien da nombre a la obra, está inspirado en un personaje histórico real: Juan Gregorio Blanco, nacido en 1829 en el partido de Juan José de Flores. Hijo de Mateo Blanco y María Ventura Núñez, su padre formaba parte de la Mazorca del gobernador de Buenos Aires, Juan Manuel de Rosas. El mal temperamento y crueldad de Don Blanco eran bien conocidos, lo que llevó a María Núñez a temer por su vida y la de su hijo. Por ello, decidió alejarse y se instaló en Lobos, cambiando su apellido a Moreira.

     La vida de Moreira se desarrollaba de manera segura y tranquila. Dueño de sus propias tierras, era un gaucho hábil en la doma de potros y el manejo del ganado, desempeñándose en tareas de campo y tropeando hacienda. En el pueblo de Navarro conoció a Vicenta Andrea Santillán, una joven bella, hija de una cautiva, con quien tuvo tres hijos. Para concretar el matrimonio, organizaron una celebración, aunque omitieron pedir la autorización que la ley exigía entonces. El Teniente Alcalde, Don Francisco, quien estaba enamorado de "la Vicenta", impuso una multa de 500 pesos a Moreira, marcando el inicio de persecuciones, hostigamientos y acusaciones injustificadas. Así comenzó la fama de gaucho salvaje y rebelde.

     Harto de las difamaciones, Moreira tomó venganza, desencadenando una serie de asesinatos y ganando cuanto duelo se le presentaba. Su reputación lo llevó a relacionarse con las más altas esferas políticas de la época, llegando a ser guardaespaldas del Ministro Adolfo Alsina, quien le regaló un caballo y su célebre daga. Sin embargo, Moreira se encontraba cada vez más lejos de recuperar su antigua vida y limpiar su nombre. El 30 de abril de 1874, fue emboscado en la pulpería y posada La Estrella, donde siempre volvía para encontrarse con Laura, su amante. Una veintena de hombres armados lo esperaban con la orden de no dejarlo escapar. En un último intento de fuga, Moreira fue alcanzado por la bayoneta del sargento Andrés Chirino, quien lo hirió por la espalda cuando intentaba saltar la tapia del boliche. Antes de fallecer, el gaucho respondió con disparos fallidos y un facazo que mutiló cuatro dedos de la mano izquierda del sargento. El facón de Juan Moreira se encuentra en el Museo de Luján, en la provincia de Buenos Aires.

     "Moreira, el salvaje", es una novela gráfica con guión adaptado por Gaby Liara e ilustraciones de Oscar Estévez, publicada en la Revista "El Tony Semanal" N°1681, el 22 de febrero de 1961.