BOLETÍN ÓPTICO

     Desde tiempos antiguos, se sabía que los espejos curvos y ciertos objetos llenos de agua, especialmente los esféricos y curvados, tenían el poder de ampliar lo que se veía a través de ellos. A partir de uno de los instrumentos ópticos más antiguos y exitosos, el telescopio, que estaba compuesto por lentes, se comenzaron a realizar pruebas para crear un dispositivo que permitiera ver objetos diminutos con un gran aumento.

     Los primeros microscopios compuestos, que combinaban una lente objetiva con un ocular, aparecieron en Europa alrededor del año 1620. Se atribuye a Zacharias Janssen, un inventor y fabricante de lentes holandés, el título de inventor del microscopio compuesto. Después de su invención, hubo un gran número de diseñadores de microscopios en varios países europeos, como Carl Zeiss, Leitz, Beck, Ross, Watson, Powell y Leatland, algunas de las familias de fabricantes más conocidas desde entonces. El cambio evolutivo en este instrumento fue constante desde entonces.

     Los instrumentos ópticos y los microscopios antiguos son piezas de gran valor tanto por su distinción estética como por su significación histórica. El coleccionismo de estos instrumentos requiere un profundo conocimiento de la historia y una mirada detallada hacia el detalle.

     En esta entrada comparto cuatro ilustraciones de Oscar Estévez creadas para las portadas del Boletín Informativo de COASGBA, el Círculo de Ópticos Asociados del Gran Buenos Aires, y dos afiches diseñados para el Segundo Encuentro Industria-Enseñanza Óptica realizado en la ENET N°11 Manuel Belgrano de la Capital Federal en noviembre de 1989.

     En la edición N°58 del año 1987, se observa una clara referencia a la visita del Papa Juan Pablo II a nuestro país en el marco de las III Jornadas Mundiales de la Juventud llevadas a cabo en abril de ese año. La visita anterior del pontífice tuvo lugar en 1982, días antes del fin de la Guerra de Malvinas.

     Las siguientes portadas de los boletines informativos tuvieron diseños inspirados en objetos e instrumentos ópticos de la colección del Museo de Óptica Instrumental de Buenos Aires, ubicado en la calle Valentín Gómez 3773 de la Ciudad de Buenos Aires, creado y dirigido por su amigo entrañable, Paolo Fiorini.