NOVELA GRÁFICA

     La novela gráfica y el cómic, también conocido como tebeo o historieta, generan debate en cuanto a sus diferencias. Se define como cómic a una secuencia de dibujos que cuentan una historia, ya sea con o sin texto. En cambio, la novela gráfica fusiona elementos del cómic y la novela tradicional. Su narrativa se desarrolla en viñetas que combinan ilustraciones y texto, manteniendo un contexto literario. Son más extensas que las historietas clásicas y van dirigidas a un público adulto, buscando profundizar en la trama y los personajes.

     Al ser un híbrido entre dos géneros, la novela gráfica tiene más recursos para explorar narrativas innovadoras, incluyendo subjetivismo y polifonía lingüística para crear personajes más complejos. Su objetivo inicial fue adaptar obras literarias al formato de historieta para llegar a un público más amplio. A diferencia del cómic, que se publica en entregas periódicas, la novela gráfica presenta una historia completa y autoconclusiva, incluso si tiene secuelas.

     La obra "El Eternauta", creada por Héctor Germán Oesterheld en 1957, se considera la primera novela gráfica. Desde entonces, han surgido numerosos títulos clásicos en este género, como "Batman: El regreso del Caballero Oscuro" de Frank Miller, "300" del mismo autor, "Bloodstar" de Richard Corben, "Contrato con Dios" de Will Eisner y "Watchmen" de Alan Moore.

    En la entrada de hoy: "A tiro de revólver", una novela gráfica completa ambientada en 1865 en Kansas City, con guion y dibujos de Oscar Estévez, publicada el 5 de julio de 1961 en la Revista El Tony N°1700. Agradezco a Carlos Martínez de TOP-COMICS por compartir estos archivos.

     La Guerra Civil o Guerra de Secesión fue uno de los conflictos más sangrientos en la historia de Estados Unidos, involucrando a más de 3 millones de hombres y cobrando la vida de alrededor de 750,000 soldados, junto con un número incalculable de civiles. Este conflicto se llevó aproximadamente el 10 % de los varones del norte entre 20 y 45 años y el 30 % de los del sur entre 18 y 40 años.

     “Una vez concluida la sangrienta guerra…ambos ejércitos disolvieron sus efectivos…¨

     Muchos soldados volvieron a sus hogares, sus ranchos…Era gente deseosa de encontrar, en el trabajo, olvido para las terribles horas pasadas…

     Otros hombres, en cambio, se aferraron a sus armas, sembrando terror…odio.

     Comenzó para muchos ciudadanos honrados, la angustia y el dolor de verse despojados de sus pertenecías…”